En un mundo donde millones de personas se sienten desconectadas de su trabajo y carecen de sentido en sus vidas, surge la necesidad imperante de liderazgo consciente y empresas comprometidas con el bienestar de sus empleados. El Primer Congreso de Liderazgo y Empresa Consciente, celebrado el 28 de mayo, fue un paso significativo hacia la creación de entornos laborales más felices y significativos.

Humberto Rueda, el Sembrador de Felicidad, es una voz destacada en esta búsqueda de transformación. Su libro «CÓMO SEMBRAR FELICIDAD EN LA ORGANIZACIÓN Y EN TU VIDA» expone la importancia de encontrar el disfrute y el propósito en el trabajo para sanar a la humanidad y construir una sociedad más próspera y estable.

El congreso abordó la necesidad de líderes conscientes, capaces de crear entornos propicios para que florezca la esencia de sus colaboradores y alcancen su máximo potencial. Las «Empresas Conscientes» son el resultado de este liderazgo inspirador, donde el propósito compartido guía el camino y se fomenta un ambiente de confianza y libertad para todos los miembros.

¿Qué caracteriza a un líder consciente? La respuesta se encuentra en el desarrollo de la Inteligencia Espiritual, una dimensión más profunda que la inteligencia emocional. Esta inteligencia abraza la inteligencia intelectual y emocional, potenciándolas y dándoles sentido. Es la conexión con el Amor y la Trascendencia, que nos permite encontrar significado en todo lo que hacemos.

Humberto Rueda identifica «Las Competencias Internas», un conjunto de 12 competencias, como pilares fundamentales de la Inteligencia Espiritual. La conciencia y el aprendizaje son las dos competencias esenciales que dan sustento a las demás. La conciencia nos permite comprender el propósito de la vida y relacionarnos empoderados con nuestras circunstancias, mientras que el aprendizaje nos ayuda a capitalizar todas las experiencias, incluso los errores, para nuestro crecimiento.

Las competencias restantes tienen como objetivo liberarnos de estados de ánimo negativos y conducirnos hacia la paz y la ambición. La gratitud, la resignificación, el perdón, la asunción y el respeto nos alejan del resentimiento, mientras que la confianza, la disponibilidad, la flexibilidad, el cambio de circunstancias y la capacidad de hacer que las cosas sucedan nos impulsan desde la resignación hacia la ambición.

La búsqueda de líderes conscientes y empresas comprometidas con el bienestar y el propósito es esencial para construir una sociedad más saludable y feliz. La inteligencia espiritual y las competencias internas desempeñan un papel clave en esta transformación, ayudándonos a sembrar la felicidad en nuestras organizaciones y comunidades y contribuyendo a la sanación de la humanidad.

El Primer Congreso de Liderazgo y Empresa Consciente fue un punto de partida para esta revolución empresarial, y el legado de Humberto Rueda, el Sembrador de Felicidad, continúa inspirando a todos a abrazar la inteligencia espiritual y convertirse en agentes de cambio para un futuro más próspero y significativo.

Fuente: corresponsables.com

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